Iluminar las mejillas: Aplicar en los pómulos y extender delicadamente hacia las sienes. Truco: Sonreír para marcar los pómulos. Realzar los pómulos: Aplicar en la parte superior de los pómulos y alrededor del ángulo externo del ojo, hasta el arco superciliar. Truco: Difuminar un tono más suave de colorete en esta zona para añadir definición. Esculpir los pómulos: Aplicar desde el ángulo superior de la oreja hasta la parte inferior de los pómulos, de forma paralela al óvalo del rostro. Truco: Fruncir los labios para marcar el contorno natural bajo los pómulos.